Estamos iniciando el mes de mayo y las primeras lluvias de la temporada se hacen ya presentes en el Sur de Jalisco. Años atrás, puntualmente era el 15 de mayo cuando el verano anunciaba de manera informal su llegada al valle de Zapotlán El Grande , ya fuese en forma de llovizna o de tupida tormenta. Ese mismo día, actualmente aún se realiza una procesión por las calles del centro de la ciudad, en honor a San Isidro labrador, que “quita el agua y pone el sol”, de acuerdo con los dichos de los abuelos y bisabuelos, aunque advertían sobre el engaño pues, casi siempre comenzaba a llover antes de que la imagen religiosa llegara a su destino. ¡Qué bonito ese aire de pueblo que conserva Zapotlán! La gente que corre bajo la lluvia a cubrirse bajo cualquier cornisa o a los portales del centro histórico, el olor del terruño mojado, del reverdecer de los cerros que rodean a la “cuna de grandes artistas”. En el ritual participan los campesinos y sus familias, quienes piden que la estación lluviosa sea benévola para sus siembras, y para octubre podamos disfrutar de ricos elotes. Esta ceremonia también se practica en el municipio de Tecalitlán.
El día 03 del mes, se festeja a la Santa Cruz, protectora de los trabajadores de la construcción. Se festeja prácticamente en toda la región, se hacen misas y a la celebración pagana asisten colonias y barrios completos a divertirse entre baile, comida, bebida y mucha convivencia. También se colocan cruces decoradas con telas, flores y papel de colores en las construcciones que estén en desarrollo, como símbolo protector y de fe, y se retiran de allí hasta concluir la obra.
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| Laguna de Zapotlán |
En el mes mas caluroso del año, el día 09 se conmemora el Día Mundial de las Aves Migratorias, y al caminar por la calle o sentarse en una banca de cualquier plaza de los municipios del sur jalisciense, puede apreciarse el sonido de los trinos de diferentes aves, las golondrinas que van y vienen con sus ágiles vuelos, las plantas y árboles en flor con sus variadas formas y tonalidades. Existen en la región también zonas naturales que fomentan la conservación de las aves migratorias y sus delicados ecosistemas bajo la categoría de sitio RAMSAR, como son la laguna de Sayula y la laguna de Zapotlán, donde podemos disfrutar de increíbles panoramas y observar la actividad de las diferentes especies de aves.
Incluso los cactus están en su fase más estética, ofreciéndonos sus jugosos y coloridos frutos, como son las pitayas, manjar ancestral digno de los dioses prehispánicos. Es notable la tradición de producir este fruto que se ha desarrollado en el municipio de Amacueca, que desde hace 15 años viene realizando durante el mes de mayo la “Feria de la Pitaya”, compartiendo con el público exposiciones y espectáculos culturales, talleres artesanales, y degustaciones gastronómicas de productos hechos a base de pitaya, nuez y café, principales producciones agrícolas de la localidad. El festival concluye con sus actividades el 24 de mayo, ultimo día de eventos. Otros municipios aledaños que ofrecen pitayas, desde finales de abril hasta principios del mes de junio, son Zacoalco de Torres, Techaluta de Montenegro, Teocuitatlán de Corona, Atoyac y Sayula. Incluso en los puestos que están al borde de la carretera se venden sabrosas pitayas multicolor, que van desde amarillas, hasta moradas pasando por rojas.
El municipio de San Gabriel celebra en mayo el aniversario del natalicio de Juan Rulfo (1917-1986), célebre autor de la novela “Pedro Páramo”. Su escritura retrata paisajes místicos de carácter histórico y social, como una metáfora de la realidad del México contemporáneo, mezclada con recuerdos de su infancia, la cual vivió en dicho municipio aunque nació en Sayula. Al recorrer los caminos del sur jalisciense que circundan al monumental Nevado de Colima, dejando atrás los bosques de pino y encino que predominan en aquellas altitudes, se llega a un territorio con muy distinta vegetación, que aparenta ser casi una planicie y sin duda evoca en la mente del viajero la eterna pregunta sin respuesta, ¿será éste el famoso “Llano en llamas”?. Hay quienes afirman que el lugar exacto se encuentra más bien entre Sayula y San Gabriel . Como sabemos, hasta el día de hoy se desconoce la ubicación geográfica precisa de los sitios que menciona Rulfo en sus obras, no sabemos siquiera si existen o si fueron creaciones de su imaginación, pueblos fantasmas con sombras por habitantes, o una fusión de todas las anteriores.
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| Casa de Juan Rulfo |
Este año, se realizará un festival en su honor del 16 al 22 de mayo en dicho municipio, con diversos eventos artísticos y culturales, así como un recorrido por la Ruta Rulfiana, que muestra la casa donde creció el escritor, así como sitios que fueron relevantes para su formación personal e intelectual.
En fin, mayo es mes del color, el sabor y la cultura en el Sur de Jalisco, que te espera con sus brazos abiertos y muchas opciones para realizar un viaje de fin de semana o, ¿por qué no?, a festejar todo el mes viviendo el turismo cultural que nos regala nuestra región y su gente.
Por: Bertha A. Gómez Ochoa
Información basada en El Observatorio del Turismo de la Región Sur y Sureste de Jalisco, disponible en: www.cusur.udg.mx/observatorioturismo
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